
Sin embargo, Lobo apuntó para otro lado. "Los cambios son necesarios a veces para reoxigenar o para quizás decir 'miren tomemos otro camino porque el que hemos estado implementando no es el que nos ha llevado a los resultados esperados'", señaló. Y explicó: "Porque al fin de todo esto lo que cuenta son los resultados".
En este sentido, Alvarez admitió la semana pasada que la policía hondureña había sido infiltrada por el narcotráfico, lo que muchos sectores, en especial el empresariado, denuncia desde hace años. El ex ministro afirmó a un diario local haber detectado al menos 20 jefes policiales que servían a narcotraficantes internacionales y dijo con ironía que ellos se habían convertido en "controladores aéreos" de decenas de avionetas que en cuatro años han aterrizado en el territorio nacional con cocaína procedentes de Colombia y con destino a Estados Unidos.
Sin embargo, Alvarez, considerado un ministro con mucho poder por haber estado muy cerca del presidente, se perfila como aspirante presidencial para las elecciones primarias de noviembre de 2013 por el partido oficial. En los comicios de 2009, ganó por mayoría abrumadora una diputación por su partido y pidió permiso al Congreso para fungir como ministro de Seguridad.
Además, Canahuati también aspira a la presidencia por el Nacional. En las primarias de 2001, se enfrentó a Lobo en las primarias, aunque perdió.
La salida de ambos significó la mayor sacudida que se produce en el gabinete de gobierno a menos de dos años de su administración, tras asumir en enero de 2010. Su motivo, no obstante, sigue siendo parte de la especulación.